Espacio Crítico 7 otoño 2009

noviembre 28, 2009

Tráfico de Animales en el Mercado de Sonora.

Filed under: Reportaje Final — Etiquetas: , , — Alberto Delgado de Ita @ 2:16 am

— ¿Lo vas a querer o no?– me dijo el vendedor regordete en tono imperativo. Me hablaba desde la parte de atrás del local, en medio de peceras, en un piso rosa resbaloso con olor a cloro y peces muertos. Yo, asustado frente al reptil que se movía inquieto entre sus manos, intenté buscar pretextos para salir de allí.

El mercado de Sonora lleva consigo leyendas que  tratan sobre la forma en que se pueden conseguir animales de todo tipo, desde leones, changos, hasta serpientes, cocodrilos etc. ¿Será verdad que podemos conseguir animales ya sea bajo pedido o no, ilegales, exóticos e incluso en peligro de extinción?¿Será cierto que los vendedores de alguna sección esotérica son brujos y videntes? Esta es la vivencia de la visita al mercado más mítico de la ciudad de México, donde el miedo surge cuando nos entrometemos a confrontar la realidad con las leyendas sobre la obtención de animales ilegales y exóticos.

El Mercado y su Historia.

El mercado de Sonora, conocido principalmente por sus afiches esotéricos y venta de animales, situado en el primer plano de la ciudad de México, entre los barrios de la Merced, aloja cuatrocientos locales que venden todo tipo de cosas. Desde cerámicas, juguetes, hierbas medicinales, figuras religiosas, bromas, productos de temporada, como ahora artículos de navidad, alebrijes etc. Y lo más impactante, consigues animales de lo más exóticos e ilegales.

Este mercado, según su página oficial, fue inaugurado el 23 de Septiembre de 1957 bajo la presidencia de Ruiz Cortines, es hoy uno de los centros de comercio más recurridos y con fama internacional en la ciudad más grande del mundo. Inaugurado en realidad es una palabra un tanto pretenciosa para darle validez a lo que hoy es el mercado, ya que inicialmente en esa fecha eran “Merced Baños”, pues el lugar era el que sostenía instalaciones de baños y regaderas al servicio de los comerciantes de la zona circundante. Con el tiempo el lugar fue adaptando anexos y adaptaciones formando un nuevo mercado,  el nombre de “Sonora” lo toma por la proximidad que tenía con el cine Sonora (hoy extinto y transformado en una tienda de autoservicio). Hoy, el mercado se ha saturado de comercios a  tal grado que se ha extendido de modo ambulante a sus afueras callejeras. Este mercado, es el centro de comercio con más movimiento después de la central de abastos de Iztapalapa en la Ciudad de México. Cada 23 de Septiembre se celebra el aniversario del mercado, dando los vendedores y el administrador en turno del mercado una fiesta de celebración anual, los vendedores invitan tacos y pozole a sus clientes, hay bailes y el nombramiento de la reina de la festividad, a éste nombramiento han sido invitadas personajes como Niurka e Itati Cantoral.

La Merced, Una Zona peligrosa, pero ¿Porqué?

Los alrededores del centro de la ciudad de México llevan consigo una fama, no solo nacional, sino internacional de ser un tanto peligrosos. La zona en donde se encuentra el mercado de Sonora, en el barrio de La Merced, es una zona casi inhabitada, al igual que el resto de las zonas conurbadas, pues bien el Centro Histórico y sus suburbios fueron en tiempos hispánicos un lugar con movimiento, no sólo comercial, sino también de instalaciones religiosas, cedes universitarias, con edificios como la primera imprenta, la casa de moneda y todas las actividades gubernamentales se llevaban a cabo en  el Palacio Nacional el cual está a tiro de piedra con La Merced. Hoy en día estas zonas se han reducido únicamente al movimiento comercial, deshabitando toda vida habitacional. Los edificios han quedado únicamente como recintos históricos y el Palacio Nacional lleva a cabo únicamente actividades protocolarias, dejando al centro solamente con la actividad comercial. El centro recibe diariamente  a dos millones de visitantes, entre trabajadores, mercaderes y compradores,  sólo treinta mil ciudadanos habitan esa zona de la ciudad, lo cual es una unidad habitacional bajísima, antes, en la época colonial había quinientos mil habitantes en la zona del centro histórico, los cuales brindaban actividad educativa, recreativa y daban vida a lo que en aquél tiempo era toda la ciudad.

el que connota los problemas sociales y demográficos  es el material humano. La falta de vivienda en el centro además de restarle vida, pues la única que hay es comercial y turística, crea una disfuncionalidad en esa parte de la ciudad, dando cabida a situaciones como el tráfico de armas, animales e inseguridad.

Lo que Hay en el Mercado

La popularidad del Mercado de Sonora está divida entre el material para brujería, limpias y supersticiones de esencias para alejar a los malos espíritus, atraer la suerte o el amor, además de haber chamanes y videntes que ofrecen la lectura de cartas o de mano para anunciar el porvenir del visitante. La sección de animales es incluso más impresionante que la sección esotérica, pues bien al pasearnos por los pasillos mal olientes, entre plumas, ladridos, y excrementos, vemos animales de diversos tipos; desde perros, hasta chivos, pájaros, guajolotes, iguanas, peces. Todos los animales que se ven, supuestamente están reglamentados y autorizados por la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT). Ésta dependencia de gobierno, es la encargada de fomentar la protección, restauración y conservación de los ecosistemas y recursos naturales del país. Ella es la encargada de vigilar y estimular el cumplimiento de las leyes, normas oficiales y programas relacionados con recursos naturales, medio ambiente, aguas, bosques, flora y fauna silvestre, terrestre y acuática, así como también es la encargada de imponer las sanciones procedentes.

Mi Visita

Mi visita al Mercado de Sonora fue bajo la intención de conocer animales que se sabe que venden, mas no están a la vista del visitante común. Me ofrecían halcones, que quizá fue el animal menos convencional que vendían sin encubrimientos,  algunos vendedores bajo mirada sospechosa me ofrecían en voz baja lo que sea que yo estaba buscando. Inmerso en el ambiente de la ilegalidad que buscaba con fines periodísticos, no sabía bien por qué animal preguntar, pensé en preguntar por un tigre, pero pensé que quizá era algo demasiado trillado incluso para los mismos vendedores cuando lo escucharan de un joven curioso. Pero mi oportunidad de ser testigo de aquello que sabía que había, pero que no se veía, llego a mis manos cuando un vendedor con los ojos idos y rojos, me dijo en voz baja que qué buscaba, que si no me interesaba un cocodrilo. Yo impresionado de su ofrecimiento pregunté que cuánto costaba, que qué tan grande era, que si lo podía ver, el vendedor me respondió “sigue a mi compañero.” Me voltee y una persona de estatura baja, regordete, con un trapeador sobre su escoba, me miró serio y con sospecha me dijo “¿si lo vas a querer? ” Yo le dije que lo quería ver. Lo seguí detrás del mostrador al fondo de su local en donde había muchas peceras, debajo de una de las peceras, sobre el piso rosa resbaloso y maloliente,  abrió una mochila azul, una mochila como las que usan los estudiantes para ir a la escuela. Pensé que sacaría no sé, unas llaves para llevarme a otro lugar y mostrarme el cocodrilo, pero nunca pensé que el cocodrilo lo guardaba allí, dentro de una mochila bajo una pecera de su local. Sacó al cocodrilo entre sus manos de la mochila, el animal inquieto entre sus manos comenzó a golpear con su cola y a retorcerse intentando zafarse de las manos de su vendedor.  Yo pegué un brinco hacia atrás del susto. Era un cocodrilo no muy grande como de un metro de longitud, pero de todos modos me asustó.  El vendedor se sorprendió que estuviese nervioso y distante del animal, pues bien se suponía que lo deseaba. Me dijo que me lo dejaba en dos mil quinientos pesos. Le pregunté que qué tanto podía crecer, me dijo que hasta dos o tres metros. Platicando entre la supuesta negociación de compra, me dijo que el animal era de Perú, que no se tenían seguido este tipo de reptiles, que quizá cada dos o tres años tenían a la venta. Que era un animal en cautiverio, es decir, que era un animal bajo el cuidado del humano, lo cual dudaba realmente. Me dijo que no había problema con los de la  SEMARNAT y me ofreció al animal con todo y pecera por tres mil pesos, con todo y charales para alimentarlo. Cuando seguí preguntando del proceso de cómo era posible que desde el Perú llegara a México pasando por las restricciones del control zoosanitario, guardó al cocodrilo en la mochila y me dijo que si sí lo iba a querer o no, le dije que regresaba, que no tenía el dinero en el momento y me retiré con la piel erizada, e impactado de que había sido testigo de apenas una pequeña parte de lo que podría haber en el Mercado de Sonora.

7 comentarios »

  1. Felicidades me gusto mucho tu reportaje y de verdad admiro tu valentia, por escribirlo. me gusto que nos describieras la atmósfera que sentiste en el momento que viste al cocodrilo y como describiste el espacio y nos mostraste parte del miedo que sentiste en tu investigacion y sin embargo a pesar de todo logras informarnos sobre la triste realidad del trafico de especies.

    Comentarios por Ana Maria Villalobos Cedano — noviembre 28, 2009 @ 11:22 pm

  2. que tal jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaa swele varakfdfffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffff

    Comentarios por emili — marzo 7, 2011 @ 6:11 pm

  3. kulo, yo kiero komprar un cuervo ahi o una guacamaya, ire a ver en kuanto me la dejan.

    Comentarios por pituda — agosto 8, 2011 @ 4:11 am

    • estás bien pinche pendejo, por gente así se sigue con la práctica de la compra y venta de animales en condiciones deprorables para éstos. Para cuando esté en tu casa sino se muere a la semana porque te lo dieron todo enfermo puede pasarte alguna enfermedad, ese lugar es la pura depravación vendiendo animales «pal amarre» o algún exéntrico que quiera un león en su casa… Sin conciencia lo único que estamos haciendo es yéndonos al carajo más rápido.
      Buen reportaje *

      Comentarios por alejandra — abril 20, 2012 @ 2:03 am

    • un cuervo estaría bien para ti!!! 😀 ojalá y no dude el animal de sacarte los ojos!!

      Comentarios por Jessica — enero 24, 2013 @ 10:59 pm

  4. Buenas Tardes, de verdad que es lamentable como tienen esos animales allí, muy bueno tu reportaje, ojalá pudiesemos hacer una marcha o algo contra este tipo de maltrato.

    Comentarios por Indiana — May 22, 2012 @ 8:36 pm

  5. Me gusto como lo describiste pero toda la sociedad debería unirse para una marcha en contra del maltrato animal esa gente se puede pudrir en la cárcel si alguien sabe de algún movimiento o página en face que ayudé a parar esto favor de informarme soy Kurt Donald en face y conozco mucha gente que haría lo que sea para parar esto incluyéndome

    Comentarios por Raven — enero 30, 2014 @ 5:51 pm


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