VERDE: se escribe en cuatro ruedas

En ciudades densamente pobladas como las Zonas Metropolitanas correspondientes al Valle de México, Toluca, Guadalajara, Monterrey, Puebla, entre otras; la calidad del aire se ve afectada por las emisiones provenientes de los vehículos automotores que circulan a diario por las respectivas vialidades. Lamentablemente, estas emisiones contaminan el aire que respiramos y tienen efectos nocivos a la salud y el desarrollo de las personas y seres vivos que las habitan. Una de las emisiones generadas, el bióxido de carbono (CO2), es considerado como un gas precursor del cambio climático que afecta no sólo a nuestro país sino al resto del mundo.

En México, los automovilistas tenemos una serie de hábitos comunes que provocan un alto consumo de combustible, y en consecuencia una gran cantidad CO2 que afectan nuestro medio ambiente. Calentar el coche por más de un minuto, acelerar rápidamente desde un alto, viajar a altas velocidades, tránsito denso, el uso inmoderado del aire acondicionado y la carga de cosas inútiles en la cajuela, son algunos de los hábitos comunes del automovilista mexicano, que, si tuviera conciencia del daño que estos hábitos provocan tanto al medio ambiente como a su carteras, sabría que se ahorraría hasta el 50% de combustible y de dinero.

Las consideraciones del automovilista serían la principal causa de un ahorro de combustible y como consecuencia, una larga duración de los recursos no renovables y mejoramiento en la economía. Pero la misma industria de los automóviles ha desarrollado tecnologías que han servido como soluciones parciales a los problemas del cambio climático y escasez de petróleo. La tecnología de los coches híbridos fue desarrollada en Japón a principios de siglo, siendo el Toyota Prius el primer automóvil con motor tanto eléctrico como de combustión interna alternados para lograr un consumo mínimo de combustible. Los coches híbridos pueden ser en serie o en

paralelo. En los primeros el motor de combustión interna acciona un generador que suministra electricidad a un motor eléctrico, mismo que se conecta a las ruedas. Los coches híbridos en paralelo, tanto el motor eléctrico como el de gasolina están conectados a las ruedas del vehículo y son más eficaces de cara a reducir el consumo y las emisiones.

Las automotrices Toyota y Ford tienen previsto para este año introducir a México automotores híbridos que se sumarán a los de Honda, la cual en el 2005 introdujo en nuestro país este tipo de automóviles.

El presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), Eduardo J. Solís, adelantó que este tipo de vehículos como son el Prius de Toyota y la Escape por parte de Ford, sean introducidos a mediados del siguiente año. Señaló que la introducción de autos híbridos al mercado mexicano es una exploración, «porque es evidente que hay un conjunto de valores que hay que observar». Mencionó en primer lugar el precio de estas unidades, seguida de la conciencia del comprador, es decir, que el consumidor esté consciente de que compra un vehículo ecológico y en tercer lugar que se trata de un coche que no tendrá la misma velocidad que los que utilizan gasolina. Los coches híbridos, aunque hasta un 20% más caros que losconvencionales (Honda Civic normal, $259,000 y Civic Híbrido, $318,000), ahorran más de el 50% de combustible además de que sólo paga $586 de tenencia (a diferencia de los $6,000 del Civic convencional) y se verifica cada dos años. Estos son los incentivos que da el Gobierno Federal para obtener un coche híbrido y así mejorar el medio ambiente. Estos coches pueden rendir hasta 24 kilómetros por litro y durar hasta casi 200,000 kilómetros (8 años) y los servicios se hacen cada 10,000 con un costo máximo de $1,600.

“El año pasado me lo llevé hasta Acapulco y el auto se comportó bellísimo en carretera. Puse el control de crucero a 110 kilómetros por hora y el ahorro fue fenomenal. El consumo de gasolina desde Insurgentes Sur (DF) hasta la Costera Miguel Alemán fue medio tanque únicamente”, relata Juan Ludlow, de 36 años.

En México, a pesar de los beneficios ambientales y económicos que aportaría este tipo de vehículos, el mercado de automóviles híbridos se encuentra en una etapa muy incipiente. Sólo Honda se ha animado a importar y vender autos híbridos, y en escala muy pequeña. Un par de armadoras ha sondeado el mercado y otras dos han hecho inversiones para fabricar vehículos híbridos en el país, pero con fines de exportación. Honda se propuso vender 500 autos híbridos por año; sin embargo, a pesar de las ventajas fiscales y regulatorias que las autoridades otorgan a los compradores (exención del impuesto sobre automóviles nuevos ,ISAN), pago reducido de 0.16% del impuesto sobre la tenencia del vehículo y obtención de la calcomanía doble cero por seis años, la empresa no ha alcanzado la meta.

En 2006, Honda vendió 484 Civic híbridos, en 2008 colocó 465, y en el primer semestre de este año apenas 118 unidades, lo que sugiere un rezago importante en las ventas de este tipo de vehículos. Directivos de Honda de México declinaron comentar para este artículo, pero representantes del sector automotriz consideran que se requieren más incentivos gubernamentales para que crezcan las ventas de autos híbridos.

“Los actuales incentivos fiscales son insuficientes, por lo que no se ve mucha presencia de estos productos en el mercado mexicano”, dice Eduardo J. Solís, presidente de la AMIA, quien confía en que, poco a poco, crecerá la demanda.

“Para que sean rentables los vehículos híbridos se necesita darles un uso intensivo; de otra manera el consumidor no percibe el costo-beneficio. Además, se espera que los niveles de precios sean más redituables”, añade Solís.

El desarrollo de las sociedades modernas conlleva un mayor empleo de energía para el desempeño de sus actividades, sin embargo este desarrollo impacta en la disponibilidad de sus recursos energéticos y en las emisiones contaminantes a la atmósfera generadas en la transformación de estos.

Por tal motivo, una de las razones para ahorrar energía en el automóvil es su contribución en el transporte de una parte de la sociedad sustentado en el uso eficiente y racional de los combustibles con la finalidad de lograr un equilibrio que permita preservar los recursos energéticos no renovables (petróleo) del país, así como el medio ambiente para las futuras generaciones. Por otra parte, es indispensable mencionar que una mayor participación de tecnologías y combustibles alternos permitirán incidir en el desarrollo sustentable del transporte de México.

José Ignacio García Muñoz